Un altar en medio de la comunidad, rodeado de tribunas ocupadas por laicos y sacerdotes, y con la participación activa de todas las obras de la Compañía de Jesús en cada oración y rito. Esa era la imagen de la Iglesia de San Ignacio el mediodía del domingo 4 de agosto y que animó a los familiares y amigos a vivir una novedosa misa.
Un ambiente de recogimiento, reflexión y proposición frente a los acontecimientos que la comunidad Ignaciana ha vivido el último tiempo fue la constante en la ceremonia que presidió el Provincial P. Cristián del Campo y que fijó en la imagen del fundador de la Compañía que celebró su día de conmemoración el 31 de julio.
“En esta ocasión no habrá homilía, vamos a hacer algo distinto, que creo tiene mucho sentido hacer por lo que hemos vivido. Pero también porque esta es una misa familiar, de amigos, de una comunidad”, fue la invitación que hizo para introducir 10 minutos de conversación con el compañero de puesto ocasional y que produjo conclusiones inmediatas entre los asistentes.
La actividad marcó la ceremonia y fue el punto de partida para una tarde de reflexión en que cada opinión tuvo su espacio, que finalizó con un momento de compartir.
La particular ceremonia fue vivida de forma muy respetuosa y activa cómo puedes ver en la siguiente galería de fotos: