Durante el mes de enero, jóvenes de diversas redes ignacianas del país, acompañados de jesuitas y agentes formativos, realizaron una caminata de sur a norte en las Áreas Indígenas Protegidas Mapu Lahual, al sur de Valdivia.
En esta experiencia los jóvenes participantes realizaron una peregrinación como la que hizo San Ignacio, ad portas de fundar la Compañía de Jesús.
En un camino lleno de luchas y cargas individuales, los jóvenes entendieron que nunca caminan solos y que el amor de Dios siempre los acompaña.
Según explica Cristián Viñales SJ, delegado de vocaciones y juventudes, Ligeros de Equipaje nace de una experiencia con jóvenes en el norte de Chile que quiere seguir profundizando en el camino que han iniciado haciendo un encuentro con representantes de las distintas redes ignacianas del país, con un fuerte contenido espiritual en el contexto del Año Ignaciano, y con el objetivo de refundar la red juvenil ignaciana a nivel nacional.
“Fue una experiencia preciosa, de caminar, conociendo profundamente la espiritualidad ignaciana, al mismo tiempo hacer comunidad, rezar juntos y descubrir la presencia de Dios en la naturaleza. Lo más probable es que la repitamos el próximo año”, agrega Cristián Viñales SJ.
Desde el área de juventudes y vocaciones se espera en este 2022 poder consolidar estos primeros pasos, tener una base crítica de jóvenes para potenciar los territorios, y tener la oportunidad, luego de este tiempo de pandemia sin actividades, de aprender y profundizar la fe de un modo comunitario.
Así lo comenta Tomás Brown SJ, promotor vocacional, quien también acompañó esta experiencia: “Las redes juveniles tienen como desafío el tener que instalarse en cada uno de los territorios, cada coordinador va a tener que armar su propio equipo para poder ofrecer actividades a jóvenes de las mismas redes ignacianas o jóvenes de cada territorio para ir conformando este nuevo proyecto de la red juvenil”.
