Hace 40 años, mientras celebraba una misa, fue asesinado Monseñor Oscar Romero, hoy santo y un profeta de la justicia en Latinoamérica. Un día antes, había pronunciado su última homilía: “En nombre de Dios y de este pueblo sufrido… les pido, les ruego, les ordeno en nombre de Dios, CESE LA REPRESION”.
Te compartimos algunos datos biográficos de su vida y labor por la Iglesia ??
?San Óscar Arnulfo Romero nació el 15 de agosto de 1917 en Ciudad Barrios, departamento de San Miguel, El Salvador.
?Fue ordenado sacerdote a la edad de 25 años en Roma, el 4 de abril de 1942.
?Su primera parroquia a su regreso a El Salvador fue Anamorós, en el departamento de La Unión. Poco tiempo después fue llamado a San Miguel donde realizó su labor pastoral durante aproximadamente veinte años.
?En El Salvador de aquellos tiempos la situación de violencia avanzaba.
?Dada su amplia labor sacerdotal fue elegido Secretario de la Conferencia Episcopal de El Salvador y ocupó el mismo cargo en el Secretariado Episcopal de América Central.
?El 25 de abril de 1970, la Iglesia lo llamó a proseguir su camino pastoral elevándolo al ministerio episcopal como Obispo Auxiliar de San Salvador. Su lema episcopal fue: “Sentir con la Iglesia”.
?El 15 de octubre de 1974 fue nombrado obispo de la Diócesis de Santiago de María y el 14 de diciembre tomó posesión de la misma. Monseñor Romero se hizo cargo de la Diócesis más joven de El Salvador en ese tiempo.
?Mons. Romero fue nombrado Arzobispo de San Salvador el 3 de febrero de 1977 y tomó posesión el 22 del mismo mes, en una ceremonia muy sencilla.
?El 12 de marzo de 1977, se dio la triste noticia del asesinato del padre Rutilio Grande, un sacerdote amplio, consciente, activo y sobre todo comprometido con la fe de su pueblo. La muerte de un amigo duele, Rutilio fue un buen amigo para Monseñor Romero y su muerte le dolió mucho: “un mártir dio vida a otro mártir”.
?“Los primeros conflictos de Monseñor Romero surgieron a raíz de las marcadas oposiciones que su pastoral encontraba en los sectores económicamente poderosos del país y unido a ellos, toda la estructura gubernamental que alimentaba esa institucionalidad de la violencia en la sociedad salvadoreña, sumado a ello, el descontento de las nacientes organizaciones político-militares de izquierda, quienes fueron duramente criticados por Mons. Romero en varias ocasiones por sus actitudes de idolatrización y su empeño en conducir al país hacia una revolución”.
?A raíz de su actitud de denuncia, Mons. Romero comenzó a sufrir una campaña extremadamente agobiante contra su ministerio arzobispal.
?La “Iglesia Perseguida en El Salvador” se convirtió en signo de vida y martirio en el pueblo de Dios.
?Ese 24 de marzo de 1980 Monseñor Oscar Arnulfo Romero Galdámez fue asesinado de un certero disparo, aproximadamente a las 6:25 p.m. mientras oficiaba la Eucaristía en la Capilla del Hospital La Divina Providencia, exactamente al momento de preparar la mesa para recibir el Cuerpo de Jesús. Fue enterrado el 30 de marzo y sus funerales fueron una manifestación popular de compañía
?En 2015, fue reconocido como mártir por odio a la fe y beatificado en El Salvador. Fue canonizado por el Papa Francisco el 14 de octubre de 2018.
Fuente: Vida Cristiana (Jesuitas Cuba)
Nueva edición de revista Jesuitas Chile
Los principales temas son los desafíos del área de parroquias, reflexiones respecto de la defensa del medio ambiente, y las proyecciones del área de vocaciones y juventudes